GIBRALTAR / José Luis G. Castillejo, texto y foto.- Fue como encontrar una aguja en un pajar. Tras un interesante paseo por Main Street, decidí descansar un rato y disfrutar del paisaje en un banco público muy próximo a Casemates Square. Allí estaba él, también sentado, y con su ‘moleskine’ particular en una mano y en la otra portaba varios lápices de colores.

Don Taylor, acuarelista norteamericano, estaba haciendo una de las cosas que más le gustan en la vida, además de viajar: plasmar en su libreta artística escenas y escenarios de sus desplazamientos por todo el mundo. En esta ocasión la ciudad elegida era Gibraltar, a la que había llegado a borde de un crucero de esos que imponen por su altura y dimensiones.

Rápidamente entablamos conversación y me dijo que, tras un paseo por el centro de la ciudad, había elegido ese banco por su luz, su arbolado y sus transeúntes, y no dudó ni un segundo en mostrarme sus últimos trabajos que había realizado durante la gira náutica que le había llevado a Gibraltar.

Aún le quedaban “algunos” kilómetros hasta regresar a su casa de Florida, aunque se le veía feliz y comunicativo porque estaba a gusto viajando, conociendo gente y explicando su obra a quien se interesaba por ella.

Fue un auténtico placer para mí coincidir con él, saludarle y mantener la típica charla de dos viajeros cuando se encuentran en algún lugar del mundo. Solo el destino sabe si volveremos a vernos otro día. Mientras tanto, aprovecharé el mail, ese gran invento del siglo XX que supera todas las fronteras físicas, para invitarle a publicar en Monplamar sus dibujos de Gibraltar. Buen viaje de regreso, Don Taylor.

(Dear Mr. Taylor, Thank you very much for being so kind to us. We’d love to share with our internet users your watercolour paintings during your stay in Gibraltar. Our Monplamar doors will always be open for you. Yours sincerely)