GRANADA.- Su provincia es la protagonista indiscutible del otoño cinematográfico español, con dos producciones en buena parte rodadas en dos de sus polos más atractivos (la Costa Tropical y Sierra Nevada) y cuyos estrenos se esperan con impaciencia, uno este mes de septiembre en Netflix y el otro, ya mostrado en el Festival de Cannes, en salas.

No es arriesgado afirmar que ambas cintas formarán parte de la Historia de la mejor Cinematografía. ¿Qué os parece un recorrido por algunos de los espacios donde fueron rodadas?

Cerrar los ojos’ es la vuelta de unos de los grandes nombres del cine español, Víctor Erice, ligado desde muchos años con Granada y en particular con la Alpujarra, donde residió junto con la novelista Adelaida García Morales, guionista de ‘El sur’.

En la nueva producción Erice, para contar la desaparición de un director de cine accidentado en pleno rodaje al borde del mar y reflexionar sobre la identidad y la memoria, eligió el escarpado litoral rocoso de Gualchos-Castell de Ferro.

Quien no conozca esta especie de acantilado ecológico azotado por el mar y sus roquedos, donde suelen anidar decenas de especies marinas, tiene un pretexto para avistarla. Son paredes calizas de una belleza sobrecogedora. Un recorrido en coche y sin prisas desde Calahonda a Castell en el que descubrirá esta auténtica joya. También se rodó, dentro de la provincia, en Nigüelas y en Dúrcal, pueblos del idílico Valle de Lecrín.

‘La sociedad de la nieve’
El otro gran estreno es ‘La sociedad de la nieve’, de Juan Antonio Bayona, que se verá desde este mes en la plataforma Netflix. Bayona y su equipo permanecieron cinco meses en Sierra Nevada recreando el accidente en Los Andes del vuelo 571 de la Fuerza Aérea de Uruguay ocurrido en 1972 y en el que solo sobrevivieron 16 de los 45 ocupantes.

El lugar del accidente original, el Valle de las Lágrimas, ha sido recreado en la Laguna de las Yeguas, un espacio que en verano es muy frecuentado por los excursionistas, pero que tras el estreno se transformará gracias a la imaginación en otras latitudes. Los actores y el equipo residieron en el club deportivo Montebajo, situado junto a los telecabinas en Pradollano.

Para rodar el filme Bayona usó tres aviones accidentados en un hangar construido en Pradollano, en la Laguna de las Yeguas y en el Cortijo Argumosa de Güéjar Sierra. La magia del cine hará el resto.

(Texto: Turgranada; fotos de ambas películas)