TURISMO.- El otoño en Andalucía no es simplemente una estación sino una experiencia. Cuando las temperaturas del intenso verano se suavizan los paisajes comienzan a transformarse en un mosaico de tonos dorados, ocres y rojizos que invitan a recorrer cada rincón de esta tierra llena de contrastes.

En 2025 el equinoccio de otoño comienza en nuestro sur del sur el lunes 22 de septiembre a las 20.19 horas y finaliza el domingo 21 de diciembre con el solsticio de invierno, por lo que esta estación durará 89 días y 21 horas.

Por otro lado, el cambio de hora tendrá lugar en la madrugada del domingo 26 de octubre. A las 3.00 horas los relojes serán atrasados 60 minutos, marcando otra vez las dos de la madrugada. En ese instante volveremos al horario oficial de invierno.

Luz especial
Las sierras se cubren de una luz especial. En la Sierra de Grazalema los bosques de pinsapos ofrecen senderos donde el frescor acompaña cada paso y en la Sierra de Aracena las encinas y los castaños se visten de otoño y llenan el aire de aromas a tierra húmeda y setas recién brotadas.

Es el momento perfecto para practicar turismo de naturaleza, caminar sin prisa y dejarse envolver por el silencio roto solo por los pájaros o el crujir de las hojas.

Los pueblos blancos, con sus calles encaladas y plazas tranquilas, se convierten en un destino ideal.

En Ronda, Arcos de la Frontera o Frigiliana, por ejemplo, el contraste entre las fachadas blancas y los colores del campo en otoño ofrece estampas únicas que parecen sacadas de un cuadro. Pasear por sus callejuelas, descubrir miradores y probar la gastronomía local es un ritual que en esta estación se disfruta aún más.

El otoño de las ciudades
En las ciudades el otoño trae consigo la calma tras la masificación veraniega. Sevilla brilla bajo una luz dorada que baña la Giralda y el Alcázar, Córdoba invita a recorrer su Judería con temperaturas agradables mientras que Granada abre las puertas a una Alhambra que se funde con los tonos rojizos de la Vega.

Málaga, Cádiz y Almería, por su parte, ofrecen playas más tranquilas, donde pasear junto al mar sin el bullicio del verano se convierte en un lujo.

Gastronomía y paisajes
La gastronomía otoñal andaluza es otro de sus grandes atractivos. En esta época llegan las setas de la sierra, las castañas asadas que perfuman las calles, los guisos calientes que reconfortan el cuerpo y los vinos jóvenes de Jerez de la Frontera y de Montilla-Moriles, perfectos para acompañar cualquier plato.

Octubre y noviembre son meses de ferias gastronómicas, rutas del vino y celebraciones enogastronómicas que hacen de la visita una experiencia para todos los sentidos.

Los paisajes agrícolas también se tiñen de vida. Los olivares, con su verde plateado, se preparan para la recogida de la aceituna, que da inicio a la temporada del aceite nuevo, auténtico oro líquido de la tierra. Los viñedos, mientras tanto, muestran una paleta de colores que va del amarillo al burdeos, invitando a recorrer rutas del vino que mezclan tradición, cultura y sabor.

Turismo cultural
El turismo cultural se complementa a la perfección con el ambiente otoñal. Festivales de música, exposiciones y celebraciones locales llenan las agendas en ciudades y en pueblos. Es también una época propicia para descubrir el flamenco en sus peñas más íntimas, perderse en museos con calma o asistir a actividades de patrimonio sin el calor ni las aglomeraciones veraniegas.

Pero quizás lo más especial del otoño en Andalucía sea la sensación de autenticidad que transmite. Es un turismo más pausado, más cercano, donde la gente comparte su día a día, donde se saborea la vida con calma. Una estación que invita a mirar con otros ojos los paisajes conocidos, a descubrir rincones ocultos y a reencontrarse con uno mismo.

En definitiva, viajar a Andalucía en otoño significa dejarse envolver por una tierra que combina historia, cultura, naturaleza y gastronomía bajo la magia de una estación que realza su belleza. Es caminar entre bosques dorados y pueblos blancos, degustar castañas y vinos jóvenes, descubrir ciudades eternas con otra luz y sentir que el tiempo se detiene para regalar momentos inolvidables. Andalucía en otoño no se cuenta, se vive.

(Imágenes generadas por IA)

 

* Andalucía es un destino turístico todo el año