ARCOS / Ángeles Castillo, Vanitatis.- Este es de los pueblos que crean una especie de adicción, tipo Altea, Mijas o Frigiliana, por no hablar de Paros, en la Grecia del mar Egeo.

Arcos de la Frontera es un rosario de monumentos, cierto, pero en sí, por dónde está, por cómo está y por su proverbial blancura, que decíamos de Vejer, también una obra de arte.

Bello que no se puede aguantar, que se note que estamos en el sur. Aquí hay duende y poderío para dar y regalar. Nos vamos (Leer más)