TURISMO.- La fuerte herencia andalusí ha marcado profundamente la fisonomía de las localidades de la Sierra de Cádiz, conformando una arquitectura popular muy singular y característica que permite al visitante sumergirse en su pasado.

El blanco de la cal va enlazando un pueblo con otro, compartiendo su arquitectura típica de casas bajas situadas en calles estrechas y zigzagueantes de grandes cuestas en las que llama la atención su limpieza y pulcritud, el orden y el esmero hasta en sus más mínimos detalles.

Los geranios que cuelgan de las ventanas dotan de colorido estas casas de estilo andaluz que resplandecen al Sol. Su distribución y formas tienen un reflejo actual en el vecino Marruecos. Todas estas villas serranas tienen una cultura de la cal arraigada desde antiguas generaciones.

Alcalá del Valle.

Construcciones identificativas
Las construcciones, que a veces se asientan sobre salientes rocosos, prolongan el blanco de la cal sobre la propia roca creando maravillosos conjuntos que cambian sus formas según la hora del día.

Los tejados de las viviendas, casi todos a dos o tres aguas, cubiertos de tejas con diversidad de tonos ocres y jalonados de blancas chimeneas ofrecen un conjunto arquitectónico identificativo de esta zona.

El agua omnipresente tiene también un protagonismo especial en el entramado urbano de estas localidades. En sus fuentes se puede saborear la más límpida y fresca agua de los manantiales de montaña. La sierra está salpicada, además, de construcciones singulares, la mayoría en desuso, pero conservadas en perfectas condiciones. Es el caso de las almazaras y molinos, algunos de agua de los llamados “de cubo”.

Setenil de las Bodegas.

Encontramos igualmente “norias de sangre” para el agua de pozo y “norias de vuelo o de corriente” para el agua de río.

Existe asimismo una oferta amplia de alojamientos (albergues, casas rurales, antiguos molinos, cortijos y refugios de montaña) reformados y perfectamente acondicionados para que los amantes de la sencillez y la tranquilidad puedan gozar durante unos días de las excelencias de la zona.

Setenil de las Bodegas, por ejemplo, cuenta con un original entramado urbano ya que sus casas se hallan construidas dentro de las rocas o sobre ellas, creando una imagen extremadamente bella y peculiar.

(Fuente: Cádiz Turismo. Fotos de apertura: Noria de El Bosque y Villaluenga del Rosario)

 

* Bienvenidos a los Pueblos Blancos de la Sierra de Cádiz